Ecrins: La Dôme de Neige (4015 m snm)

FICHA TÉCNICA:

Tipo de ruta: Alta montaña (glaciar y ascensión).

Época: Verano (junio, julio y agosto a pie) y abril, mayo y junio (con esquis en función de la nieve).

Orientación: Nordeste.

Desnivel: 2141 m (en dos jornadas: Etapa 1: salida parking Pré de Madame Carle, 1874 m snm - Refuge des Écris, 3175 m snm; Etapa 2: Refuge des Écris, 3175 m snm - cima: Dôme de Neige, 4015 m snm).

Dificultad técnica: F+ (la dificultad viene dada por la altitud). Itinerario largo y con más de 2000 metros de desnivel, glaciar agrietado con puentes de nieve en ocasiones frágiles (es de los cuatromiles más asequibles y recomendables en Ecrins). 

Distancia: 23 km. 

Características: La aproximación hasta el Refuge des Écrins se completa en aproximadamente 4 horas, acumula gran parte del desnivel pero de manera suave y continua. El glaciar tiene grietas de tamaño considerable y merece la pena ir encordado para atravesarlo. Una vez superado el glaciar las pendientes hasta la cima no superan los 40º. 

Material necesario: Crampones, piolet, casco, arnes, cuerda de 30 m y material de aseguramiento en progresión en glaciar. 

Descenso: Por el mismo sitio. 

Duración recomendada: 2 días. 

Recomendaciones: Llegar temprano al Refuge des Écrines puesto que el ataque a cima ha de iniciarse no más tarde de las 4:30 a.m. Con la entrada del sol no se recomienda inicar el ascenso ya que la consistencia de la nieve lo dificulta y lo hace peligroso. El descenso se completa el mismo día de la cima y merece la pena pararse en el Refuge Glacier Blanc para comerse una porcioncita de tarta de queso con arándanos después de tamaña paliza ;D. 

Más bibliografía: Alpinismo fácil en Ecrins.  

Mapa: Meije - Pelvoux - Parc national des Écrins. TOP25 3436ET. 1:25.000. IGN. 

(Mapa web Pirineos3000).

APROXIMACIÓN AL REFUGE DES ÉCRINS (verano)- Jornada 1

Atravesando Ailefroide seguimos la carretera hasta Pré de Madame Carle 1874 m snm donde encontramos una amplia zona donde poder aparcar. No está permitido la acampada ni caravanas ni furgos con techo, pero si vamos en furgo o "autobús ;P" que es discreto no hay problema. Al llegar podemos darnos el gustazo de ver cómo asoma la cabecita el Glacier Blanc por un gran cortado (por donde comienza la aproximación).

Consejo: llegar por la tarde a última hora ya que mucha gente ya se habrá ido y así no habrá problema de aparcamiento.  

El camino de subida al Glacier Blanc es bastante frecuentado por lo que no tiene pérdida. El camino bordea el Glacier Blanc por su margen izquierdo (nuestra derecha mirando en dirección ascenso) y pasa por el Refuge Glacer Blanc (2542 m snm), más o menos hasta este punto se tarda 1h 30' - 2h. Continuando el itinerario es fácil desviarse para caminar sobre el glaciar, pero la aproximación al Refuge des Écrins es más rápido por la ladera. En total otras 2h más. Después de la cena en el refugio, los guardas dan información del itinerario y algunas recomendaciones interesantes.

GLACIAR Y CIMA (verano)- Jornada 2

(incluye el descenso por el mismo itinerario) 

Es recomendable iniciar ruta no más tarde de las 4:00-4:30 a.m. por lo citado en la "ficha técnica". 

Es importante tener claro el camino que bordea al Glacier Blanc hasta el pie de La Dôme ya que se recorrerá de noche y es fácil desviarse con el riesgo que ello conlleva (a mano izquierda queda el laberinto de grietas y a mano derecha la ladera con frecuentes desprendimientos de piedra).

Una vez en el pie de La Dôme y bajo las fauces del gran serac iniciamos el ascenso a la cima, por delante tendremos dos pasos con 40º de inclinación con respiros intermedios de 20-35º hasta llegar a los pies de la Barre des Écrins, aquí el camino se desvía por debajo de la rimaya hacia la derecha y pasando por la Brèche de Lory (3974 m snm) se llega a la cima de la Dôme de Neige (4015 m snm).

 

 CÓMO VIVIMOS LA AVENTUUURIA:

(24-08-2011_26-08-2011) 

Aventureiras: Alba (la Tello) y Saruka (Szgany). 

Esta aventuuuuria fue la etennna duda durante el viaje, más que por la meteo por la confianza que sintiéramos en las capacidades de una y de otra tanto en la progresión en glaciar como de resistencia frente a la altitud y rapidez en el ascenso.

Para mi, como ya he comentado en post anteriores, era mi primer viaje alpino y contadas con los dedos de media mano las salidas que había hecho a alta montaña. Para Alba, la primera vez que tendría que hacer de líder de cordada en terreno alpino y con una novata a su cargo. Teníamos que tener en cuenta tanto mi resistencia como la posible habilidad que mostrara para una posible maniobra de rescate en glaciar ya que la cordada en cuanto a fuerza, tamaño y experiencia estaba un poco desequilibrada. 

Por ello, la primera incursión fue en la Aiguille du Golèon (ideal para practicar sin riesgo la progresión en glaciar y superación de grietas -básicamente ensayar las maniobras sin peligro-), luego pasamos un par de días en La Berarde para relajarnos, escalar un poco y yo aprender a montármelo con una polea, un machard, los tornillos de hielo y la cuerda para hacer un rescate por caida en grieta. Esto fue muy divertido, simulamos la caida de Alba y con el crono en marcha tenía que rescatarla montando todo el tinglado. Sabíamos que en caso de ocurrir algo lo más fácil sería llamar a los servicios de emergencia pero no estaba demás aprender estas cosillas. 

 Estudiando como hacer la maniobra de rescate en el camping de La Berarde.

Otro inconveniente añadido era  que después de la Aiguille du Golèon yo tenía unas ampollas en los talones que no curaban ni a la de tres...los pies de gato los tuve que llevar con calcetines y las botas no podía ponérmelas. Yo sabía que lo íbamos a hacer, lo sabía, tenía ese poder en mí, esa ilusión... esa determinación frente al que pase lo que pase sabes que vas a estar bien y lo vas a conseguir. Asique
desmontamos campamento y montamos "el autobús" poniendo rumbo a Ailefroid.

Desde la carretera me sentí minúscula, insignificante, me veía como una hormiguita saltarina que, ajena a los peligros, danza a su libre albedrío sin preocupaciones por el mañana. 

 Vistas desde la carretera.

Llegamos a Ailefroid sobre las 5:00 p.m. dimos una vuelta por el pueblo mientras nos contamos nuestros miedos, nos emocionamos, estabamos entre nerviosas, miedosas y eufóricas por la aventura del día siguiente. Hasta tal punto que decidimos escribir una postal a nuestros padres, hermanos y amigos para decirles todo lo que los queríamos (sin que se notara demasiado nuestra preocupación por el compromiso del día siguiente).

Al anochecer llegamos al parking de Pré de Madame Carle (1874 m snm), hicimos la cena y yo me probé las botas, las ampollas me dolían pero aun quedaba una noche para que terminasen de curar. Decidimos que por la mañana veríamos cómo estaba.

Por la mañana el veredicto fue...botas a tooooope!!! cargamos mochiloncios y pusimos marcha al Refuge des Écris (3175 m snm).

 Vistas desde el parking (1874 m snm).

 Subida hacia el Refuge Glacier Blanc (2542 m snm).

  Proseguimos hacia el Refuge des Ecrins (3175 m snm).

 

La jornada fue intensa y emocionante, llevábamos un ritmo de marcha muy bueno y llegamos las primeras al Refuge des Ecrins, asique pasamos la tarde contemplando las maravillosas vistas del Glacier Blanc, la Dôme y la Barre des Ecrins. 

Luego merendamos dentro del refu mientras leíamos libros que había en la sala de estar/comedor. El tiempo pasaba rapidísimo, empezó a llegar mucha gente, nos dimos cuenta de que todos iban con guías y de que nosotras eramos las únicas mujeres. Al principio no lo percibimos, pero después de la cena el desarrollo de los acontecimientos nos hizo pensar que por alguna razón no eramos muy bien recibidas...

La conclusión la sacamos porque después de la cena el guarda del refu dió algunos consejos (en francés e inglés), cuando terminó le pedimos a la cocinera (que hablaba español) si podía avisar al guarda para explicarnos con más calma la alerta que había dado (nada más y nada menos que el día anterior a las 5:00 a.m. se había producido un alud y tuvieron que rescatar a un montañero y que el itinerario de subida había que modificarlo bordeando el alud), sabíamos que hablaba español porque al llegar al refu estuvimos hablando con él, pero quizás dada la presencia de guías (que nosotras no habíamos contratado) el buen hombre decidió no salir de la cocina (de todos modos esta es una conclusión personal).

Pusimos el despertador a las 3:30 a.m. más o menos cuando todos los demás, desayunamos y comenzamos a caminar. Sabíamos que sería bueno no perder a los demás montañeros ya que así la travesía por el glaciar sería más fácil, pero nos retrasamos poniéndonos los crampones y los perdimos de vista. Iniciamos marcha sobre las 4:30 a.m.

Lo atravesamos exitosas, las sensaciones de la noche con el ruido de los crampones clavándose en el hielo y el sonido de la roca de las laderas rodando de vez en cuando pendiente abajo hacia el glaciar era fráncamente...ACOJONANTE Y ESTREMECEDOR.

Una vez a pie del serac (sobre las 6:10 a.m.), nos miramos, yo estaba algo insegura, no sabía si aguantaría la subida aunque las ampollas por el momento no habían dicho ni pío, pero la voz de Alba fue firme y serenadora "Tranquila, paso a paso, que siempre estamos a tiempo de darnos la vuelta" y efectivamente, paso a paso (me lo repetía a mi misma al ritmo en la subida), paso a paso alcanzamos y superamos a algunos montañeros y llegamos a la cima (8:50 a.m.)!!!

 Iniciamos el ascenso, primer tramo con más pendiente.

 Tramo que daba tregua a las piernas.

 Y comenzaba a salir el sol...sobrecogimiento, emoción, ganas de llorar de alegría e inyección de energía para continuar.

 Casi al pie de la Barre des Ecrins.

 La Tello que se moría de ganas de subir a la Barre :P

 A lo lejos veíamos el final de la rimaya donde podía distinguirse el camino que conducía a la cima.

 Mar de nubes a nuestros pies.

 Pequeño descanso para disfrutar de las vistas...

 ...y directas...

 ...a la cima :D :D :D!!!

 El descenso fue rápido y con la luz del día el alud impresionaba mucho más!

Atravesamos el glaciar y nos paramos a descansar...estábamos derrotadas, y esta vez Alba acusaba mucho dolor en los pies, los metimos en el agua que corría en el lateral del glaciar y sin más dilación seguimos camino abajo.

 El paisaje cambiaba los marrones grisáceos y blancos por tonalidades verdes.

Paramos en el Refuge Glacier Blanc para encontrarnos con una de las mejores recompensas... 

¡¡¡TARTA DE QUESO CON FRUTOS DEL BOSQUE!!! 

 Llegando al parking comenzó a llover y no paró hasta el día siguiente que amaneció soleado de nuevo!!!

¡¡¡No me lo podía creer, lo habíamos conseguido!!! 

¡¡¡Objetivo cumplido y carrusel de emociones controlado!!

¡¡¡SED DE AVENTURAS, ESPÍRITU ITINERANTE E INQUIETO...HASTA LA PRÓXIMA AVENTUUUURIA!!!!

A día de hoy, después de 1 mes de recuperación y aun por delante 2 semanitas de "readaptación deportiva" espero a partir de ahora poder contar muuuuuuuuuchos muchos encadenes!!! :D :D :D!!!

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